¿Habrá una diferencia entre mi vida, lo concebido y ese último momento de aliento? ¿Podré vivir con esa plenitud mi día a día? Sin duda mi experiencia en este mundo no ha sido una colección de logros desde una perspectiva social, ya que jamás ha sido ese mi enfoque.
Como un río, de manera natural surge en mi interior esa
terrible influencia social creando grandes, vacías y estériles necesidades; cuando
logro detectarlas la ansiedad de aparte de mí, entonces recobro la
tranquilidad, el sentido y la claridad, me aparto de esas tontas necesidades
sociales que no me pertenecen, no van conmigo.
La vida es breve, pero jamás es tarde para recobrar el
sentido y el reconocimiento del otro.
Te quiero.
Juan M. Castro
No hay comentarios.:
Publicar un comentario